Un clásico elegante que brilla especialmente en fechas señaladas, como Navidad.
Estas patatas fondant son crujientes por fuera, mantecosas por dentro y llenas de sabor. Cocinadas en caldo y doradas en la sartén, son la guarnición perfecta… O el plato principal si te atreves a innovar…
En cualquier caso, el bocado de este manjar no te va a dejar indiferente.