La seguridad alimentaria y la salud de nuestros clientes son dos aspectos por los que velamos mucho en Patatas Hijolusa.
La seguridad alimentaria y la salud de nuestros clientes son dos aspectos por los que velamos mucho en Patatas Hijolusa. Por esta razón mantenemos un estricto control de la cadena de frío durante todo el proceso de manipulación, conservación, almacenaje, transporte, distribución y venta de nuestras patatas.
¿Por qué es importante controlar la temperatura a la que están sometidas las patatas?
La refrigeración es un método de conservación de los alimentos por la que los productos se exponen a bajas temperaturas, siendo estas siempre superiores a los 0ºC. En nuestro caso, mantenemos una temperatura máxima de 8ºC, que es el ideal para el almacenaje y conservación de las patatas.
De esta forma aseguramos que el alimento siempre está en perfectas condiciones desde que lo recolectamos hasta que es entregado en las superficies comerciales de nuestros clientes.
Y si se rompe la cadena de frío ¿qué ocurre?
Si la cadena de frío no se respeta, el sabor, el aroma, la textura y las propiedades nutricionales de los alimentos podrían verse deteriorados. Además, se perdería la seguridad alimentaria, ya que se activa el crecimiento y proliferación de microorganismos y bacterias cuando la temperatura es elevada.
Y todos estos factores repercutirían directamente sobre la calidad de las patatas. Una calidad que en Patatas Hijolusa se convierte en nuestra razón de ser.
¿Cómo garantizamos en Hijolusa el mantenimiento de la cadena de frío?
Controlamos la temperatura desde que cargamos las patatas en el campo, según la distancia y la temperatura ambiental de los trayectos.
Cuando las patatas llegan a la empresa pasan por diversos procesos de control de calidad, y se almacenan en un ambiente controlado durante todo el proceso de lavado y envasado. Una vez que el producto está preparado contamos con varios camiones frigoríficos rotulados con nuestras marcas en los que se establece la temperatura adecuada para garantizar que no se rompe nunca la cadena de frío hasta su entrega. Además, para el suministro local de nuestros clientes del canal HORECA, disponemos de un camión frigorífico de reparto de menor tamaño, y dos furgonetas con las que llevamos la mercancía a los clientes más próximos.
Una auténtica flota para conseguir nuestro objetivo: la satisfacción del consumidor con nuestros productos.